El Fondo de Inversión Pública (PIF) de Arabia Saudita ha firmado un acuerdo plurianual con la empresa europea de infraestructura de IA D-AI para desarrollar centros de datos nacionales soberanos, marcos de identidad digital y sistemas de computación en la nube. La medida subraya una tendencia creciente hacia la soberanía tecnológica dentro del Reino, buscando reducir la dependencia de los servicios externos en la nube.
Detalles clave de la asociación
La colaboración seguirá un modelo económico de “beneficio compartido”, priorizando la retención del valor nacional a través de sistemas gobernados localmente y el desarrollo del liderazgo técnico saudí. D-AI diseñará e implementará centros de datos avanzados capaces de respaldar la capacitación en inteligencia artificial a gran escala, operaciones de ciberseguridad y cargas de trabajo computacionales seguras para agencias gubernamentales.
Más allá de la infraestructura, la asociación también abarca plataformas de servicios al ciudadano y de identidad digital de próxima generación, con D-AI trabajando junto con las autoridades digitales sauditas para implementar estos sistemas. Un objetivo clave es garantizar que todos los datos sigan almacenados, procesados y gobernados bajo jurisdicción saudita, manteniendo un control nacional completo sobre los activos digitales críticos.
Por qué esto es importante: Visión 2030 y diversificación tecnológica
Este acuerdo es parte de un esfuerzo más amplio para diversificar la economía saudita más allá de los hidrocarburos, alineándose con los objetivos de Visión 2030. El Reino está invirtiendo agresivamente en capacidad de computación de IA, aprovechando sus reservas de capital, recursos energéticos y bienes raíces para convertirse en un líder global en este campo.
En los últimos meses se ha visto un aumento en los anuncios de infraestructura de IA que involucran a actores importantes como AMD, Amazon Web Services, NVIDIA y xAI, lo que indica un compromiso serio para desarrollar gigavatios de potencia informática dentro del país.
La tendencia es clara: Arabia Saudita no sólo está invirtiendo en IA; está construyendo la infraestructura fundamental para poseer su futuro de IA. La medida plantea dudas sobre las implicaciones a largo plazo para los proveedores globales de nube y el futuro de la soberanía de los datos en un panorama digital en rápida evolución.
La asociación con D-AI también se centrará en el desarrollo del capital humano, asesorando a ingenieros, formuladores de políticas y líderes técnicos saudíes para garantizar la sostenibilidad y la innovación a largo plazo dentro del creciente ecosistema de IA del Reino.
Esta inversión estratégica en infraestructura soberana de IA está posicionando a Arabia Saudita para un futuro en el que pueda competir eficazmente en la economía digital global, independientemente de las dependencias externas.
